Los nadie

Las personas sin hogar no son noticia. En pocos medios de prensa se recogen las agresiones o fallecimientos de quienes viven en la calle. 

El frio del invierno, la nieve y la lluvia si pueden conseguir que en alguna página de periódico se dediquen unas líneas a esta realidad que no queremos ver, porque nos duele y nos pone frente a un espejo que devuelve la imagen de un mundo injusto y egoísta, ajeno al sufrimiento físico y moral de millones de personas que llamamos «personas en situación de exclusión», «los nadie», «los invisibles», «los pobres»...

Escucha nuestra oración de hoy, 

Por todas las personas, que no tienen hogar.

Por aquel que duerme bajo el puente, en el banco del parque, en el portal o en la estación de autobús.

Por aquel que sólo pueden encontrar un refugio para pasar la noche,
      pero que debe deambular durante el día.

Por aquel que no puede pagar su hipoteca o su alquiler.

Por aquel que no tiene familia o amigos,
      que puedan ayudarle.

Por aquel que no tiene un lugar donde guardar sus posesiones,

      que son lo único que le permite recordar quién es.

Por aquel que ha sido olvidado por nuestra sociedad.

Por aquel que tiene miedo y no tienen esperanza.

Por todos ellos, te pedimos que les proporciones refugio, seguridad, esperanza y compañía.

Oremos por todos nosotros, para que no seamos adormecidos por la complacencia y el olvido.

 

Jesús, ayúdanos a ver Tu rostro en los ojos de cada persona sin hogar que encontremos, para que podamos por medio de nuestras manos, de nuestra lucha,  traer justicia y paz a los que no tienen hogar. 

 AMÉN